El testamento oral

El testamento. La declaración de nulidad del testamento

El testamento. La declaración de nulidad del testamento

El tes­ta­men­to, como cual­quier otro acto expre­si­vo de la volun­tad pue­de ser decla­ra­do nulo. Este artícu­lo tra­ta sobre ello, la decla­ra­ción de nuli­dad del tes­ta­men­to.

4/​11/​2020 Por Alon­so Tre­na­do. Tiem­po de lec­tu­ra 5 minutos

Los diferentes tipos de sucesión

Pode­mos dis­tin­guir la sucesión:

  • Tes­ta­men­ta­ria
  • Intes­ta­da
  • Mix­ta
  • Con­trac­tual

En dere­cho común, el regu­la­do por el Códi­go Civil y no en los regí­me­nes fora­les, sólo son admi­ti­das en dere­cho las tres primeras.

Así, el Códi­go Civil, en su artícu­lo 658, regu­la que la suce­sión se defiere:

  • Por la volun­tad del hom­bre mani­fes­ta­da en testamento.
  • A fal­ta de tes­ta­men­to por dis­po­si­ción de ley.

“Artícu­lo 658.

La suce­sión se defie­re por la volun­tad del hom­bre mani­fes­ta­da en tes­ta­men­to y, a fal­ta de éste, por dis­po­si­ción de la ley.

La pri­me­ra se lla­ma tes­ta­men­ta­ria, y la segun­da, legítima.

Podrá tam­bién defe­rir­se en una par­te por volun­tad del hom­bre, y en otra por dis­po­si­ción de la ley.”

Los dos tipos de suce­sión, tes­ta­da (con tes­ta­men­to) e intes­ta­da (sin tes­ta­men­to), son com­pa­ti­bles, y a esa nue­va jurí­di­ca es la que lla­ma­mos suce­sión mixta.

Concepto de testamento

Se regu­la en el artícu­lo 667 del Códi­go Civil, que lo defi­ne como aquel acto por el cual una per­so­na dis­po­ne para des­pués de su muer­te de todos sus bie­nes o par­te de ellos.

“Artícu­lo 667.

El acto por el cual una per­so­na dis­po­ne para des­pués de su muer­te de todos sus bie­nes o de par­te de ellos se lla­ma testamento.”

Capacidad para hacer testamento (la capacidad para testar)

  1. Solo pue­den hacer tes­ta­men­to las per­so­nas físi­cas; las per­so­nas jurí­di­cas pue­den pre­ver en sus esta­tu­tos el des­tino de sus bienes.
  2. Para poder tes­tar se tie­ne que tener la capa­ci­dad de obrar; al ser el tes­ta­men­to un ejer­ci­cio de volun­tad per­so­nal, no cabe que nadie pue­da suplir la capa­ci­dad para ello. No se pue­de tes­tar por poderes.
  3. No pue­den tes­tar (artícu­lo 663 del Códi­go Civil), el menor de 14 años, ni el que habi­tual o acci­den­tal­men­te no se halla­re en su cabal juicio.

La declaración de nulidad del testamento

En cuan­to para tes­tar es nece­sa­rio estar en ple­na capa­ci­dad de obrar, y dado que el artícu­lo 663 del Códi­go Civil regu­la que no pue­de tes­tar aquel que de for­ma habi­tual o acci­den­tal­men­te no se halla­re en su cabal jui­cio, el tes­ta­men­to pue­de ser decla­ra­do nulo. 

¿Qué se entiende por cabal juicio?

Esta­rá inca­pa­ci­ta­do para tes­tar aquel que no se halle en su cabal jui­cio por sufrir una per­tur­ba­ción men­tal per­ma­nen­te o tran­si­to­ria, de cual­quier cla­se, que afec­te o alte­re sus facul­ta­des inte­lec­tua­les y le impi­da emi­tir su volun­tad con rele­van­cia jurídica.

En estas situa­cio­nes tam­bién se encon­tra­rán los que estén en situa­ción de embria­guez, sonam­bu­lis­mo, bajo el efec­to de dro­gas o bajo los efec­tos de la hipnosis.

La perturbación intelectiva debe ser grave para poder declarar la nulidad del testamento

Para poder decla­rar la nuli­dad del tes­ta­men­to es pre­ci­so que:

  1. La per­tur­ba­ción sea grave.
  2. Debe dar­se en el momen­to de otor­gar tes­ta­men­to, artícu­lo 666 del Códi­go Civil. De ahí la nece­sa­ria prue­ba de capa­ci­dad que el nota­rio debe efec­tuar; apun­tar la impor­tan­cia de este jui­cio que de for­ma pre­via debe rea­li­zar el nota­rio, y todo ello sin estar obli­ga­do a tener cono­ci­mien­tos médi­cos, y sin que pue­da reque­rir infor­mes médicos.
  3. La per­tur­ba­ción inte­lec­ti­va debe ser obje­to de prueba.

Para quien quie­ra estu­diar más este asun­to, dejo el enla­ce de la STS Roj: 3164/​2015, de fecha 26 de junio de 2015, núme­ro de reso­lu­ción 386/​2015, que acla­ra bas­tan­te estos asuntos.

El testamento firmado antes de la enajenación mental es válido

  • Así lo regu­la el artícu­lo 664 del Códi­go Civil.

“Artícu­lo 664.

El tes­ta­men­to hecho antes de la ena­je­na­ción men­tal es válido.”

Conclusiones

El tes­ta­men­to una vez fir­ma­do ante el nota­rio, quien está obli­ga­do a efec­tuar el jui­cio de capa­ci­dad de obrar, es váli­do fren­te a todos.

Sin embar­go, pue­de soli­ci­tar­se judi­cial­men­te su nulidad.

Como ejem­plo de la anu­la­ción del tes­ta­men­to pue­de con­sul­tar­se la Sen­ten­cia de la Audien­cia Pro­vin­cial de A Coru­ña que anu­la el tes­ta­men­to de una mujer octo­ge­na­ria por con­si­de­rar que, a pesar de no estar inca­pa­ci­ta­da judi­cial­men­te cuan­do lo fir­mó, “se encon­tra­ba impe­di­da para regir su per­so­na y bie­nes, tenien­do afec­ta­da la capa­ci­dad de cono­cer el alcan­ce de sus actos, estan­do inte­li­gen­cia y volun­tad gran­de­men­te mermadas”.

SAP A Coru­ña, ROJ SAP C 2215/​2019 ECLI: APC:2019:2215, de fecha 22/​10/​2019, núme­ro de reso­lu­ción 373/​2019.

Pue­des con­sul­tar nues­tros otros artícu­los sobre heren­cias aquí