Repartidor de GLOVO. Falso autónomo.

Repartidor de GLOVO. Falso autónomo. Reseña de jurisprudencia.

Por Alon­so Trenado:

De nue­vo habla­mos del FALSO AUTÓNOMO, aquel emplea­do que bajo el ampa­ro del frau­de de ley no es dado de alta en el régi­men gene­ral, es pri­va­do de sus dere­chos como tra­ba­ja­dor, y no pue­de ampa­rar su rela­ción en el Esta­tu­to de los Tra­ba­ja­do­res. En este caso tra­ta­mos un caso de un repar­ti­dor de GLOVO, y como tras su aná­li­sis judi­cial se con­clu­ye con que es un fal­so autó­no­mo, su ver­da­de­ra rela­ción es labo­ral, y por tan­to su des­pi­do tie­ne la con­si­de­ra­ción de improcedente.

Tiem­pos de semi­ex­cla­vi­tud, en el que es el pro­pio tra­ba­ja­dor el que se ve abo­ca­do a tra­ba­jar sin des­can­so, a des­ho­ra, sin dere­chos, a cam­bio de una par­ca retribución.

Nues­tras ciu­da­des se lle­nan de “Rider”, sin luces, sin cas­co, en bici­cle­ta, peda­lean­do para que no haya gas­to en com­bus­ti­ble (una moto, un coche). El futu­ro de nues­tros hijos vin­cu­la­dos a las nue­vas tec­no­lo­gías, a la excla­vi­tud moderna.

Ya lo decía Byung-Chul Han, filó­so­fo al que hay que leer, aun­que cues­te leer, y no haya serie en Net­flix sobre lo que cuen­ta, en su céle­bre ensa­yo “La Socie­dad del Can­san­cio”.

Si te gus­ta pen­sar no te pier­das su entre­vis­ta en el perió­di­co El país “Aho­ra uno se explo­ta a sí mis­mo y cree que está realizándose”

Supe­ra­do el emplea­dor exi­gen­te, que exce­de la jor­na­da labo­ral, que paga poco, supe­ra­do por el con­flic­to social, la huel­ga, los sin­di­ca­tos, solo cabe inven­tar una nue­va figu­ra que con­ti­núe su sen­da, el tra­ba­ja­dor “auto­ex­plo­ta­do”, aquel que no rei­vin­di­ca sus dere­chos, que des­co­no­ce sus dere­chos, que solo pien­sa en ingre­sar (como si fue­ra un autó­no­mo), que per­ma­ne­ce conec­ta­do, a todas horas, sin pri­va­ci­dad, sin reve­lión, sin pensamiento.

Rider. Falso autónomo

A lo que voy, en recur­so de supli­ca­ción, el Tri­bu­nal Supe­rior de Jus­ti­cia de Astu­rias, Sala de lo Social, en sen­ten­cia de fecha 25 de julio de 2019, la sala falla a favor del repar­ti­dor de GLOVO (los repar­ti­do­res, tam­bién lla­ma­dos “riders”, “couriers” o “glo­vers”), con­si­de­ran­do la rela­ción como labo­ral (fren­te a la mer­can­til), y con­de­na a la empre­sa al pago de la indem­ni­za­ción por des­pi­do improcedente.

“Es impen­sa­ble que el actor pudie­ra desem­pe­ñar su tra­ba­jo trans­por­tan­do comi­das entre los res­tau­ran­tes y los even­tua­les clien­tes, en cali­dad de tra­ba­ja­dor autó­no­mo, al mar­gen de la pla­ta­for­ma y con sus solos medios (con su vehícu­lo y con su móvil), ya que el éxi­to de este tipo de pla­ta­for­mas, se debe pre­ci­sa­men­te al sopor­te téc­ni­co pro­por­cio­na­do por las TIC que emplean para su desa­rro­llo y a la explo­ta­ción de una mar­ca, en este caso Glo­vo, que se publi­ci­ta en redes socia­les a tra­vés de los bus­ca­do­res tipo Goo­gle, sitio al que acu­den los clien­tes cuan­do nece­si­tan la com­pra y entre­ga de comi­da y los pro­duc­tos que la deman­da­da suministra”.

Si te encuen­tras en una situa­ción similar:

DENUNCIA A LA INSPECCIÓN DE TRABAJO, aquí te dejo dos intere­san­tes artícu­los sobre el particular:

¿Nece­si­tas un abo­ga­do exper­to en dere­cho laboral?