Notificaciones de Hacienda en Agosto

¿Que ocu­rre con las noti­fi­ca­cio­nes de Hacien­da reci­bi­das duran­te el mes de agosto?

La res­pues­ta: Noti­fi­ca­cio­nes de Hacien­da en agos­to… A prio­ri… válidas.

No es raro encon­trar en la acti­vi­dad coti­dia­na del des­pa­cho noti­fi­ca­cio­nes de Hacien­da reci­bi­das duran­te el mes de agos­to, lo que en muchos casos supo­ne que el pla­zo para pre­sen­tar ale­ga­cio­nes o recur­so ha trans­cu­rri­do pro­vo­can­do la fir­me­za de la resolución.

La Admi­nis­tra­ción tie­ne la obli­ga­ción de inten­tar la noti­fi­ca­ción en dos oca­sio­nes, es decir, si tras el pri­mer inten­to de noti­fi­ca­ción este resul­ta infruc­tuo­so, debe inten­tar un segun­do inten­to en día y hora dis­tin­tos (por ejem­plo al día siguien­te, y en vez de a las 11 a las 13 horas).

Si tras el segun­do inten­to tam­po­co ha podi­do noti­fi­car­nos, Hacien­da, pue­de publi­car la noti­fi­ca­ción en el BOE, que como todos sabe­mos, es un perió­di­co de lec­tu­ra común de todos y cada uno de los que habi­ta­mos este lugar lla­ma­do Espa­ña (sar­cas­mo tie­ne la frase).

¿Que ocu­rre enton­ces cuan­do estoy de vaca­cio­nes? Pues que a dife­ren­cia de las noti­fi­ca­cio­nes elec­tró­ni­cas, en las que pode­mos ele­gir en que perio­do de 30 días al año no que­re­mos reci­bir­las, no tene­mos la opción de ele­gir el perio­do en que Hacien­da nos pue­de noti­fi­car en papel (como toda la vida).

Lo lógi­co es que si un sufri­do ciu­da­dano está de vaca­cio­nes (mere­ci­das no me cabe la menor duda), y no está en su domi­ci­lio en el pér­fi­do día que Hacien­da le man­da la pri­me­ra noti­fi­ca­ción, tam­po­co lo esta­rá al día siguien­te, aun­que sea a hora dis­tin­ta. Mala suer­te, por­que a prio­ri se le dará por notificado.

Menos mal que el Tri­bu­nal Supre­mo, en su sen­ten­cia de 13 de mayo de 2015, ayu­da al sufri­do ciu­da­dano, e inter­pre­ta que si se pue­de acre­di­tar que en el momen­to del inten­to de noti­fi­ca­ción se esta­ba de vaca­cio­nes y no había nadie en el domi­ci­lio la noti­fi­ca­ción no ten­drá vali­dez. Admi­tir la vali­dez de la noti­fi­ca­ción con­cul­ca el dere­cho cons­ti­tu­cio­nal de defen­sa (artícu­lo 24.2 de la Cons­ti­tu­ción Española).