Eliminación de la cláusula suelo

Reclamación previa, abogado y procurador

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de provisión de fondos

Nues­tro des­pa­cho, espe­cia­li­za­do en Dere­cho Ban­ca­rio y con un por­cen­ta­je del 100 % de éxi­to en sus deman­das fren­te a enti­da­des ban­ca­rias, pre­sen­ta una cam­pa­ña espe­cial en la que, sin des­em­bol­sar pro­vi­sión de fon­dos, pue­de usted con­se­guir la eli­mi­na­ción defi­ni­ti­va de la cláu­su­la sue­lo de su hipo­te­ca y la devo­lu­ción de las can­ti­da­des que su ban­co le ha cobra­do indebidamente.

¿Como eliminar la cláusula suelo?

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Con­ta­mos con un por­cen­ta­je de éxi­tos del 100% en nues­tras deman­das fren­te a enti­da­des ban­ca­rias, habien­do con­se­gui­do la total supre­sión de la cláu­su­la sue­lo en las hipo­te­cas de nues­tros clien­tes. Infór­me­se sin com­pro­mi­so! Pri­me­ra con­sul­ta total­men­te gratuita.

Las deno­mi­na­das “cláu­su­las sue­lo” son “acuer­dos”, inclui­dos en la escri­tu­ra nota­rial de una hipo­te­ca, que limi­tan el tipo de inte­rés míni­mo a apli­car a la hora de cal­cu­lar el impor­te de la men­sua­li­dad de su hipoteca.

Este es el moti­vo que por mucho que baje el Euri­bor (índi­ce de refe­ren­cia prin­ci­pal y que se apli­ca en la gran mayo­ría de hipo­te­cas), usted no verá dis­mi­nui­da su cuo­ta hipo­te­ca­ria, pre­ci­sa­men­te por­que la cláu­su­la sue­lo limi­ta la baja­da del tipo de interés.

Por ejem­plo: Una hipo­te­ca que con­tie­ne una cláu­su­la sue­lo de un 3,00 %. En la fase de nego­cia­ción con el ban­co, usted acor­dó un inte­rés de Euribor+1,5 puntos.

En sep­tiem­bre de 2015, el Euri­bor se situó en 0,159 %, con lo cual, su tipo de inte­rés a apli­car sería de un 0,159 + 1,5= 1,659 %.

Sin embar­go, la exis­ten­cia de la cláu­su­la sue­lo impi­de la apli­ca­ción de este inte­rés, fiján­do­se en un 3,00 %, casi el doble que lo que real­men­te le correspondería.

Las cláu­su­las sue­lo se inser­tan siem­pre den­tro de las “cláu­su­las finan­cie­ras” de su escri­tu­ra de hipo­te­ca, den­tro del apar­ta­do “inte­rés varia­ble”. En ella sue­len encon­trar­se expre­sio­nes tales como “en nin­gún caso, el inte­rés míni­mo a apli­car será infe­rior a …”.

Las cláusulas suelo no son ilegales

Las cláu­su­las sue­lo son, en sí mis­mas, lega­les. No dejan de ser esti­pu­la­cio­nes y acuer­dos a los que lle­gan las partes.

No obs­tan­te, los clien­tes y titu­la­res de las hipo­te­cas casi nun­ca son cons­cien­tes del sig­ni­fi­ca­do de la cláu­su­la sue­lo, igno­ran­do inclu­so que su hipo­te­ca con­tie­ne una.

Es este defec­to de infor­ma­ción, siem­pre atri­bui­ble a la enti­dad ban­ca­ria, lo que abre las puer­tas a la recla­ma­ción fren­te a su banco.

El Tri­bu­nal Supre­mo ha teni­do la opor­tu­ni­dad de pro­nun­ciar­se en dife­ren­tes sen­ten­cias, entre ellas la Sen­ten­cia núme­ro 840/​2013 del pleno, de 20 de enero de 2014, Sen­ten­cias núme­ros 384 y 385 de 2014, ambas de 7 de julio; 387/​2014 de 8 de julio; y 110/​2015, de 26 de febrero.

¿Que pasos tengo que seguir para eliminar la cláusula suelo?

Los pasos a seguir para con­se­guir la eli­mi­na­ción defi­ni­ti­va de su cláu­su­la sue­lo comien­zan con una recla­ma­ción al Ser­vi­cio de Aten­ción al Clien­te del ban­co, soli­ci­tan­do tan­to su eli­mi­na­ción como la devo­lu­ción del dine­ro que le han esta­do cobran­do de más.

Si el ban­co no atien­de su peti­ción, ha de acu­dir­se a la vía judi­cial, inter­po­nien­do la corres­pon­dien­te deman­da en el Juzgado.

Actual­men­te, el 98 % de las deman­das de eli­mi­na­ción de cláu­su­las sue­lo fina­li­zan con éxito.

La eli­mi­na­ción de la cláu­su­la sue­lo supo­ne que el ban­co está obli­ga­do a recal­cu­lar el tipo de inte­rés apli­ca­ble a su hipo­te­ca, reba­jan­do sus­tan­cial­men­te su cuo­ta hipo­te­ca­ria, devol­vién­do­le el dine­ro que le ha cobra­do indebidamente.

En una hipo­te­ca tipo, la cuo­ta pue­de reba­jar­se en unos 120–150 euros men­sua­les (depen­dien­do del impor­te de la hipo­te­ca, el tipo de inte­rés apli­ca­ble, el pla­zo, etc.).

En nues­tra pri­me­ra con­sul­ta gra­tui­ta, le cal­cu­la­re­mos con exac­ti­tud la reba­ja en el impor­te de su cuo­ta hipo­te­ca­ria que supon­dría la eli­mi­na­ción de su cláu­su­la suelo.